«El 21 de enero de 1924, al anochecer, a las 6 h. 50 m. falleció Lenin de un derrame cerebral. En la misma fecha, por la noche, se reunió el Pleno del Comité Central. El CC del partido dirigió un llamamiento al pueblo, en el que decía: «Ha muerto el hombre bajo cuya dirección combativa nuestro partido, envuelto en el humo de la pólvora, enarboló con mano recia la bandera roja de Octubre en todo el país, barrió la resistencia de los enemigos y consolidó firmemente el dominio de los trabajadores en la que fue Rusia zarista. Ha muerto el fundador de la Internacional Comunista, el jefe del comunismo mundial, el amor y el orgullo del proletariado internacional, la bandera del Oriente oprimido, el dirigente de la dictadura obrera en Rusia».
La dolorosa noticia se propagó rápidamente por el país y por el mundo entero. El 22 de enero, M. Kalinin, Presidente del Comité Ejecutivo Central, comunicó la noticia de la muerte de Lenin a los delegados al XI Congreso de los Soviets de toda Rusia.
El 23 de enero fue trasladado de Gorki a Moscú el féretro con el cadáver de Lenin y colocado en la Sala de las Columnas de la Casa de los Sindicatos. Por espacio de cuatro días, a pesar de las rigurosas heladas, centenares de miles de obreros y campesinos, soldados rojos y empleados, delegaciones de trabajadores de todos los confines de la Unión Soviética, adultos y niños pasaron, día y noche, por la Sala de las Columnas para rendir el último homenaje al gran Lenin. El dolor del pueblo era ilimitado».
Tomado de: Instituto de Marxismo-Leninismo, Lenin. Esbozo biográfico, Ed. Progreso, Moscú, 1975. (Disponible en http://old.cjc.es/wp-content/uploads/2009/05/esbozo-biografico-lenin.pdf)